~Episodio 3x05: El
precio de la vida ~ gracias
a Carlos
El episodio empieza con un flashback de la infancia de Mr.Eko: le vemos
robando algo de comer en la iglesia para su hermano Yemi, pero es pillado in
fraganti por una monja. Ella inmediatamente le lleva a la iglesia para que Eko
pueda confesar su pecado de robo, aunque Eko piensa que sólo estaba robando
algo de comida para su hermano. Pero la monja insiste. Eko parece no estar de
acuerdo.
El fundido nos lleva de vuelta a Eko en un estado comatoso, mientras Sayid,
que ya ha llegado de un viaje de dos días desde el otro extremo de la isla, le
examina. Cuando Sayid y Charli se alejan, Eko sale del trance cuando su hermano
Yemi se le aparece, sosteniendo un encendedor y diciéndole que ya es hora de
confesar sus pecados. Mientras tanto, mientras Sayid y Charlie se alejan, la
tienda en la que Eko estaba empieza a arder, y Sayid corre a sofocarlo mientras
Charlie saca a Eko del fuego. Una vez el fuego está extinguido, todos se
sorprenden de la desaparición de Eko.
Mientras, Ben invita a Jack a asistir a una ceremonia en honor a Collen, la
mujer que Jack no pudo salvar. Jack aprovecha la oportunidad para hablar con Ben
sobre su tumor de médula, después de suponer que las radiografías eran suyas.
Le pregunta si tiene algún síntoma, pero Ben responde que no sabe de lo que le
está hablando. Durante la procesión, Ben pregunta a Juliet,que también acude
al funeral, por qué le enseñó a Jack las radiografías. Ella responde que fue
él quien las vio, pero que ella nunca le dijo que eran de Ben.
De vuelta al campamento, Locke y Desmond discuten sobre cómo salvar a Jack,
Kate y Sawyer, cuando Desmond revela que el ordenador de la escotilla podía
haber servido no sólo para pulsar el botón, sino que también para algún tipo
de comunicación, en cuyo caso podrían utilizarlo para comunicarse con Los
Otros. Sayid les recuerda que la escotilla ha implosionado, pero Locke sugiere
acudir a la otra estación, la Perla, y comprobar si se puede hacer algo desde
allí. Cuando Sayid comenta que Eko ha desaparecido, Locke pregunta si dijo algo
antes de hacerlo, y Charlie responde que murmuraba algo sobre su hermano. Locke,
inmediatamente se figura que Eko ha vuelto al avión donde dejaron el cuerpo de
su hermano, justo encima de La Perla, y que en realidad todos ellos se dirigen
al mismo lugar. Locke pide a los demás si alguien quiere acompañarlos en la
misión, lo cual introduce a dos nuevos personajes, Nikki y Paolo.
Mientras, Eko, dando tumbos, intenta mantenerse en pie para encontrar el
camino a través de la selva. Otro flashback del pasado de Eko en Nigeria, en el
justo momento en que Eko es llevado de vuelta al pueblo por los soldados
después del incidente en el avión. Entra en la iglesia, tomándose un momento
para contemplar el crucifijo, y después camina hacia el confesionario, de donde
coge una Biblia que contiene una foto de cuando él y Yemi eran niños. Mientras
la mira, una mujer y un niño entran en la iglesia preguntando por el padre
Yemi. Ella dice que trabaja en la clínica, y su hijo es el monaguillo del padre
Yemi. Eko les cuenta que Yemi ha sido reclamado y que él ocupará su lugar. El
flashback termina y el plano vuelve a Eko en el presente, en la isla, y mientras
se levanta observamos cómo el monstruo de humo serpentea detrás de él. Cuando
se gira para observarlo se encuentra cara a cara con unos hombres alrededor de
él, ensangrentados y suplicándole que no les mate. Cuando va a golpear a uno
de ellos, se convierte en el niño del flasback anterior, vestido de monaguillo,
y Eko se detiene. Eko se asusta y está confundido, y sus alucinaciones
desaparecen.
El grupo conducido por Locke alcanza a Eko, justo después que el monstruo se
le aparezca tras él, una vez más, para después desvanecerse en el bosque, y
van juntos a la Perla. Una vez allí, Locke pregunta a Eko acerca de lo que
vió, diciendo que él tambien lo vió bien, y que le pareció una luz hermosa y
brillante. Eko responde que eso no es lo que vio él. Después Eko escala las
ruinas del casco del avión donde está el cuerpo de Yemi, pero ya no está
allí. Eko permanece sentado afuera mientras Locke y los otros entran en la
escotilla. Una vez dentro, Sayid lo intenta con las linias de comunicación con
poco éxito. Nikki les advierte de los otros monitores que hay en la escotilla,
y sugiere encenderlos para encontrar una imagen. Sayid lo intenta, y en el
segundo intento consigue una imagen en directo de lo que parece ser otra
escotilla. La cámara, lentamente, hace un barrido hacia la derecha, desvelando
un hombre con un parche que mira directamente a cámara, y que después la
apaga. Locke aclara: “Debía estar esperándonos”.
De vuelta al campamento de Los Otros, Juliet le lleva a Jack su comida, una
hamburguesa con queso. Mientras hablan Ben irrumpe en la sala y le pide a Juliet
que le deje hablar con Jack en privado. Juliet se va a regañadientes. Ben le
cuenta a Jack que tenían un plan perfecto para desmoronar a Jack, o sea, para
convencerle de que los Otros no son sus enemigos, para que así él quisiera
operar la espina dorsal de Ben. Ben resalta el gran parecido de Juliet con la ex
mujer de Jack como parte del plan para convencerle. El plan, no obstante, se
truncó cuando Jack vio las radiografías y supuso que se habían tomado para la
posterior intervención de Ben. Ben le pregunta a Jack si cree en Dios, después
de contarle que descubrió su tumor dos días antes de que “un cirujano
espinal cayera del cielo”.
Más tarde, cuando Jack está en su celda, Juliet le trae una película, y
dice que es “Matar a un ruiseñor”. Mientras la película corre, Juliet le
dice a Jack que debería operar a Ben para ayudarle. Mientras, en la
televisión, de espaldas a la cámara que monitoriza la celda de Jack, ella
sostiene signos. Con esos carteles, ella le pide a Jack que ignore todo lo que
está diciendo en voz alta. Los carteles continuan diciendo que Ben es un
mentiroso y muy peligroso. Ella dice que alguno de ellos (referiéndose a los
Otros) quieren un cambio. Juliet dice también que Jack debe hacer que la
operación fracase para matar a Ben, y que ella le protegerá si lo hace.
Mientrastanto, afuera de La Perla, Yemi aparece una vez más, y conduce a Eko
hacia un claro en la selva. Yemi le dice que es tiempo para confesar sus
pecados, pero Eko responde que él no ha escogido la vida que le ha tocado, y
que no se arrepiente de nada de lo que ha hecho, haciendo todo lo que ha podido
con lo que le ha tocado. Yemi se enfurece, y exclama que Eko le esta hablando
“como si fuese su hermano”, y desaparece. Eko, persiguiéndole,
preguntándole “Quién eres tu?”. El monstruo negro de humo aparece de
repente, irguiéndose tras Eko. El humo crea una mano que agarra a Eko y le
golpea contra los árboles y finalmente contra el suelo.
Locke y los otros encuentran a Eko estirado y sin movimiento en el suelo. Con
su último aliento, Eko susurra en el oído de Locke. Locke se acerca a los ojos
de Eko. Después Locke revelará que Eko dijo que ellos son “los siguientes”.