~Episodio 3x08: Flashes before your eyes~
gracias
a Álvaro
Flashes before your eyes es el octavo episodio de la
tercera temporada de Lost, y el número 55 de la serie. Se emitió por primera vez
el 14 de Febrero de 2007. Está escrito por Damon Lindelof y Drew Goddard y
dirigido por Jack Bender. El personaje Desmond Hume es el protagonista de los
flashbacks.
El episodio tuvo una audiencia de 12.8 millones de
espectadores, el índice de audiencia más bajo de la historia de la serie para un
capítulo de estreno.
Argumento:
Charlie y Hurley están saqueando el alijo de bienes que
Sawyer tiene escondido en su cabaña, cuando Desmond se les acerca y les dice que
le acompañen a un sitio. Los tres se adentran en la selva y se encuentran con
Locke y Sayid. Locke les informa de que Eko ha muerto y que necesitan que
Charlie y Hurley mantengan la calma cuando los demás se enteren de la noticia.
Charlie pregunta cómo murió Eko, y Locke le dice que la isla lo mató, respuesta
que no convence a Charlie. De repente, Desmond sale corriendo hacia la playa y
los demás le siguen. Corre hacia la orilla y se zambulle en el agua, nada hacia
el interior y rescata a Claire, que se estaba ahogando. Charlie pregunta alta
como Desmond podía saber que Claire se estaba ahogando, y Hurley le dice que
puede ver el futuro.
Claire agradece a Desmond que le haya salvado la vida.
Mientras, Charlie trama un plan para hacer que Desmond les cuente la verdad
acerca de su supuesta habilidad precognitiva. El plan consiste en emborracharle.
Le ofrecen una botella de alcohol como tregua, pero Desmond la rechaza,
argumentando que ya ha pasado bastante tiempo borracho últimamente. Sin embargo
cambia de idea cuando ve la marca del whisky, un MacCutcheon de 60 años. Más
tarde, después de haber bebido y cantado juntos, Charlie le pregunta acerca de
su habilidad para ver el futuro, pero Desmond no quiere contestar y se marcha, y
Charlie le llama cobarde. Desmond se da la vuelta y le tira al suelo, gritando
que no quiere saber lo que él ha tenido que ver.
Empieza un flashback en la escotilla, cuando Locke destrozó
el ordenador, Desmond introduce la llave, la gira, y de repente se encuentra
tumbado en el suelo de su antiguo apartamento, en un charco de pintura roja.
Penélope aparece y le pregunta si se encuentra bien. Cuando Desmond le pregunta
qué acaba de pasar ella le contesta que ha mezclado pintura, escaleras y
alcohol. Desmond besa a Penélope. Mientras camina hacia su habitación, ve en un
reloj que es la 1:08, que le recuerda a los minutos que tenía que esperar cada
vez que quería introducir los números en el ordenador. El número le deja parado
un momento, pero no está seguro de lo que significa.
Más tarde, Desmond se está vistiendo para una entrevista de
trabajo con el padre de Penélope. El pitido del microondas suena exactamente
igual que el contador de tiempo de la escotilla, y Desmond parece confuso otra
vez. Mientras llega a la entrevista, escucha a un repartidor que dice que el
paquete es para las 8:15, y tiene un flash con los números.
La palabra Namaste aparece escrita al revés en uno de los
cuadros de la oficina del señor Widmore, junto a un oso polar, unas montañas y
una estatua de Buda. Durante la entrevista, el señor Widmore le dice que puede
trabajar en administración. Desmond le dice que él ha venido para pedirle la
mano de Penélope. Widmore le cuenta una historia acerca del almirante
MacCutcheon, coge una botella de MacCutcheon de 60 años y saca dos vasos, pero
sólo pone whisky en uno. Dice que un solo sorbo de ese whisky vale más de lo que
él podría ganar en todo un mes. Se lo bebe de un trago, y le dice a su futuro
yerno que no es merecedor de probar ese whisky, y tampoco se merece a su hija.
Desmond sale furioso, tirando su corbata, y ve a Charlie
tocando música en la calle, toca Wonderwall, de Oasis. Desmond se pone a hablar
con él, y le pregunta que de qué le conoce, Charlie se encoge de hombros, y le
dice a la multitud que el comportamiento de Desmond es un claro ejemplo de
porqué no se debe tomar drogas. Entonces Desmond se da cuenta de que conoció a
Charlie en la isla. Le intenta explicar que la otra vez, cuando salió furioso y
tiró la corbata se puso a llover, y de repente se pone a llover.
Desmond está ahora totalmente convencido de que está
volviendo a vivir su vida por segunda vez, y queda con un amigo suyo, Donovan,
profesor de física. Discuten acerca de viajes en el tiempo en un pub. De fondo
suena “Make your own kind of music” de Cass Elliot, la misma canción que estaba
escuchando cuando volaron la puerta de la escotilla. En la televisión del pub
están poniendo un partido de fútbol, y le dice a su amigo que recuerda esta
noche: el equipo que va perdiendo está a punto de marcar el primero de dos
goles, que harán que su equipo gane el partido, y Jimmy Lennon entrará y le
pegará con un bate al dueño del pub, por una deuda de juego que tienen
pendiente. Donovan espera pacientemente, pero nada de lo que ha dicho Desmond
ocurre.
Más adelante, Desmond se va de compras a por un anillo de
compromiso para Penélope. La dueña de la tienda, la señora Hawking le muestra un
anillo bastante humilde. Cuando le dice que se lo queda, ella le pide el anillo
de vuelta, diciéndole que no se puede casar con Penélope, que se supone que le
entrarán dudas, hará un viaje en barco alrededor del mundo, acabará en una isla,
pulsando el botón en la escotilla o todo el mundo morirá. Ambos salen de la
tienda, y ella apunta hacia un hombre con los zapatos rojos. Desmond le dice que
cree que ella está en su subconsciente. Minutos más tarde un andamio se
derrumba, matando al señor de los zapatos rojos. Él le pregunta porqué no ha
avisado al señor de lo que iba a pasar y ella le responde que el universo tiene
su propia forma de auto-corregirse. Si ella le hubiera avisado de este
accidente, el señor hubiera muerto de cualquier otra forma. Desmond, incrédulo,
se marcha para proponerle matrimonio a Penélope. En el camino, pasa al lado de
un centro de reclutamiento militar, lo que hace que otra vez se quede parado y
confuso. Pero no entra, y sigue con su camino para ver a Penélope.
La pareja ha quedado para ir a comer, y se paran para que
les hagan una foto. Después de que Penny pague 5 libras por la foto, Desmond
cambia de repente de parecer respecto a su relación, no sólo no puede mantener a
su novia, ni siquiera tiene suficiente para pagar al fotógrafo. Le dice que ella
se merece a alguien mejor. Penélope, enfadada le dice que no se esconda detrás
de esas excusas y que admita que simplemente es un cobarde. Él dice que no están
predestinados a estar juntos, y Penélope se marcha, dolida, y él tira el anillo
al río.
Desmond vuelve al pub. Se fija en que hay una botella de
MacCutcheon de 60 años detrás de la barra, en la estantería, pero pide la pinta
más barata para celebrar el mayor error de su vida, que dice estar convencido de
estar cometiendo por segunda vez. “Make your own kind of music” vuelve a sonar
en el jukebox. Se fija en el partido que están haciendo en la tele, un equipo
acaba de marcar gol. Desmond se da cuenta de que este es el partido del que se
acordaba, si que puede recordar el pasado, pero se había equivocado de día, y
dice en voz alta que aun hay tiempo para arreglar el problema. En ese momento
Jimmy Lennon entra en el pub con un bate y Desmond le avisa al camarero de que
se agache porque le va a pegar justo en ese momento, al agacharse el camarero,
Desmond recibe el golpe.
Se despierta en la isla otra vez, desnudo. Corre por la
selva, encontrándose objetos de la escotilla y también su fotografía con
Penélope, y suplica por otra oportunidad para arreglar su error.
Volvemos a la actualidad, Hurley le aparta de encima de
Charlie y Desmond cae, arrodillándose y sollozando. Entonces Charlie le ayuda a
levantarse y le lleva a su tienda, donde le pregunta por la verdad, por última
vez.
Desmond cede y le cuenta que vio flashes de su vida antes de
despertarse en la selva. Pero aun ve flashes. Primero, vio a Charlie
electrocutado por un rayo, luego le vio ahogarse cuando iba a rescatar a Claire.
Desmond le dice que le ha salvado de morir dos veces, pero que el universo tiene
una forma de corregir el destino. Le dice que no importa cuanto lo intente
evitar, finalmente Charlie morirá.