HENRY IAN CUSICK, el actor escocés destinado a interpretar un papel importante
en la tercera temporada de Lost, el drama increíblemente popular sobre los
supervivientes de un accidente aéreo en una isla misteriosa, se subió por
primera vez a un escenario con el Strathclyde Theatre Group (STG). Y aunque
ahora está empezando a disfrutar de su éxito internacional, comenzó como un
amateur entusiasta. "Me encantaba- era un sitio fantástico para estar, " dice
Henry, que sacó tiempo para hablar con la gente de Strathclyde en mitad de su
mudanza a Hawaii, donde se volverá un miembro regular del casting de la serie.
Como el extraño náufrago Desmond, encontrado de forma memorable viviendo dentro
de una escotilla secreta, hizo un par de apariciones intrigantes en la segunda
temporada, ganándose a los fans, que pidieron a los productores que volviera.
Con 36 años, Henry se unió al STG de adolescente, conocido entonces como Ian,
justo al terminar el colegio en Newton Mearns. Según lo recuerda, una carrera
como actor era lo último que tenía en mente. "Tenía 17 o 18 años. Se
convirtió en mi vida de alguna forma, ibas allí y te encontrabas con todos tus
amigos, eran la gente con la que salía de copas. En aquel momento era joven y me
limitaba a disfrutar de aquello. Más tarde la gente me dijo 'deberías ser
profesional' y fue estupendo oír eso, pero no conocía a ningún actor, ni en mi
familia ni nada, así que lo que me importaba entonces era divertirme, "
recuerda.
Pero la experiencia le cambió. "Todos mis amigos hasta entonces tenían 17 años y
no estaban interesados en el teatro, así que mezclarme con gente de diferentes
edades, más mayores o actores profesionales, de pronto hizo que surgieran todas
esas cosas en las que nunca había pensado o de las que nunca había hablado. Fue
un completo despertar a la vida."
La primera persona a la que Henry recuerda haber conocido en la STG, por raro
que suene, es a Mark Thompson- ahora el director artístico del Royal Lyceum
Theatre en Edimburgo, pero por aquel entonces dirigiendo su primera obra. "No
conseguí el papel, pero me uní al equipo de producción. Y luego conseguí un
papel en una obra llamada Peasants - había otra llamada To Die Among Friends -
oh, no sé cuántas obras hice, había tantas. Fui de obra en obra y si no
estaba en una hacía cosas detrás del escenario. Lo he hecho todo, encima y
detrás del escenario".
También conoció a Susan Triesman, que sigue dirigiendo la STG. Ella también
recuerda a Henry con cariño: "Creo que fui la primera que le subió a un
escenario. No suelo decir esto, pero la primera vez que vino a una audición,
había tanto talento ahí que podías decir que era algo especial. Estaba claro
desde el principio que tenía presencia en escena y que había que canalizar eso."
"Susan siempre me animaba", dice Henry. "Y Sylvia (la administradora de STG,
Sylvia Jamieson) siempre cuidaba de mí. Pasaba tanto tiempo allí que mi madre
solía llamar y preguntar si me habían visto, y Sylvia siempre me decía '¡tienes
que llamar a casa!". Henry empezó a tomarse en serio la actuación a medida que
el grupo ganó experiencia con una obra en el festival de Edimburgo llamada Water
Of Life, escrita por Chris Ballance. "La obra trataba sobre Burke y Hare y ganó
un premio Fringe First. Hicieron un tour por Escocia mientras se creaba su nueva
casa en Ramshron, con la trilogía de Torch Song.
"Empezaron a pagarnos... no era mucho, pero era algo."
Inspirado, Henry intentó acceder a la escuela de Arte Dramático y consiguió una
plaza en la Royal Scottish Academy of Music and Drama, pero estaba a punto
de llevarse una sorpresa. "Me echaron por el mismo motivo por el que me gustaba
it a STG: ¡salir por ahí después y divertirme!" dice. "Pero me lo pasaba
demasiado bien y no había ido a las suficientes clases. Así que volví a la STG y
seguí allí."
A medida uqe las carreras de sus amigos progresaban, Henry empezó a sentirse de
lado. Finalmente, consiguió un papel de oso polar en una pantomima del Citizens
Theatre y siguió haciéndose un nombre en el teatro profesional con el Citz y más
tarde, la Royal Shakespeare Company y el National Theatre. Pero, por aquel
entonces ya casado con la directora teatral Annie Wood con la que tiene tres
hijos pequeños, quería saltar a la pantalla.
"Incluso aunque fui a la STG y todo eso porque era divertido, siempre estuve
influenciado y me sentí atraído por las películas y la televisión. El teatro
siempre parecía el medio, y la recompensa el cine," admite.
Frustrado por la falta de oportunidades en Gran Bretaña, consiguió un nuevo
agente en Hollywood y consiguió papeles que incluyen la serie 24, el marido de
Demi Moore en Half Light y Jesus en la aclamada por la crítica Gospel of John.
Pero es en Lost donde se está haciendo con un gran nombre. Como en sus tiempos
en Strathclyde, Henry insiste que actuar para él sigue siendo cuestión de
divertirse. "Me encanta trabajar. Suena tonto, pero tengo tanta suerte de estar
haciendo esto- es genial hacer lo que te gusta. Es estupendo trabajar con todo
el mundo en Lost y Hawaii es precioso, no me puedo quejar."
Susan Triesman cree que se lo merece. "Me alegro tanto por él. Su talento es su
talento, nosotros no creamos eso, pero creo que le ayudamos a descubrir lo que
era. Cuando le veo en televisión ahora, sigo viendo a alquien que tranquilamente
produce, sin hacer un número de ello, personajes reales que salen y te tocan."
La última vez que Henry visitó en Ramshorn fue para ver la exhibición de sus
primeros 30 años, que incluía fotos suyas en obras de STG. "Era una maravillosa
pequeña comunidad," dice con cariño. "Si estás interesado en el teatro en
cualquiera de sus formas - escribir, dirigir, actuar- la STG es un sitio
fantástico para aprender."