Esta nueva compasión nació en algún momento entre el rodaje de la
explosiva finale de la quinta temporada, en la cuál Sawyer fracasó
en salvar a su amor, Juliet (Elizabeth
Mitchell), y los primeros episodios de la próxima temporada,
en la que Sawyer luchará con una profunda culpabilidad.
Sin embargo, sea cual sea el destino que los dioses de la isla (Damon
Lindelof y Carlton Cuse) tengan para Sawyer en mayo de 2010, Holloway
estará preparado para quitarse esos vaqueros desgastados, cortarse la
melena y volver a Los Angeles a buscar papeles en el cine. "Para
entonces, la historia de Sawyer habrá sido contada", dice Holloway. “Mi
viaje estará completo”.
Sentado en una playa no muy lejos de su hogar en Oahu, Holloway dice que
no está solo en sus sentimientos de satisfacción y gratitud. Con el
final de la serie acercándose, se ha dado cuenta de que el cast ha
descubierto un profundo afecto por la serie y por los demás. "Es un
placer estar en el set este año", dice. "Cuando nos vemos, hay una
alegría especial".
"Parece como que el instituto se va a acabar y todos nos ponemos
sentimentales", coincide Terry O’Quinn (Locke). “Hay mucha dulzura estos
días".
"Todos tenemos una sensación de últimos momentos", acuerda Michael
Emerson (Ben). "Quizá esta sea la última escena que rodamos en este
emplazamiento... o quizá sea la última vez que hable con este personaje
en particular".
Pero no siempre ha sido así. Holloway confiesa que a medida que las
temporadas avanzaban, se podían ver huecos en la camaradería cuando los
actores enterraban sus cabezas en sus iPhones y leyendo guiones. Ahora
hay "conversaciones tontas" con Emerson, Jorge Garcia (Hurley) y Ken
Leung (Miles), sesiones de jazz improvisadas con O’Quinn, Daniel Dae Kim
(Jin) y Naveen Andrews (Sayid). Y Yunjin Kim (Sun) dice que ella, Jeff
Fahey (Lapidus) y Leung incluso han tomado clases de Pilates juntos,
"como excusa para pasar tiempo juntos fuera del set".
"Hay una energía ahora aquí que es reminiscente del primer año, el cual
fue muy mágico", dice Holloway.
Por aquel entonces, Holloway no podía haber imaginado los bizarros giros
que la extraña serie tomaría, incluyendo viajes en el tiempo,
conversaciones con muertos y el descubrimiento de una ominosa estátua de
cuatro dedos. Sin embargo reconoce que la extraña trama sacó algunos de
los mejores momentos de sawyer. Su favorito, cuando Sawyer y Kate
(Evangeline Lilly) estaban encerrados uno enfrente del otro en las
jaulas de los others en la temporada tres. El que menos le gusta, la
recurrente estafa de Sawyer de acostarse con mujeres, tomar su dinero y
largarse. "No se sentía real, y siempre me sentía estúpido haciéndolo",
dice.
Más recientemente, objetó sobre la feliz vida de su personaje con
Juliet, que convertía a Sawyer en una especie de osito. "Me negué la
primera vez que leí el guión. Era como, 'Venga, hombre, ¿es un tío majo
ahora? ¿Jefe de seguridad? Qué gilipollez'. Me asustaba. No quería
perder su mordiente".
Holloway no tenía por qué preocuparse. Cuando llegue febrero, él, y los
fans, pueden esperar un resurgir del añorado Sawyer duro. Pero no antes
de dejar bien atada la trama de Juliet. Mitchell, quien ahora
protagoniza "V", regresó recientemente a Hawaii para rodar algunas
escenas super secretas.
"Fue bastante destacado e importante para preparar algunas cosas que la
gente descubrirá más tarde", dice Holloway. "Tuvimos esta genial
experiencia, y luego ella se marchó de nuevo".
Pero la reunión que muchos fans mueren por ver es la de Sawyer y Kate.
Al final de la temporada anterior, ambos compartieron una larga mirada,
presenciada por la intuitiva (y descorazonada) Juliet, quien se dio
cuenta de que aún hay una gran química en marcha. Pero, tras la
desaparición de Juliet, Holloway dice que la agonía de Sawyer hace que
"no sea posible para él estar con Kate. Ahora mismo, no le importa una
mierda la vida, ni nadie que esté en ella. Está destrozado por dentro.
Hay un innegable amor por Kate, pero todo lo que hay dentro de el lucha
para no llegar allí".
Holloway no está para nada seguro de que pudiese tragarse un final feliz
para Sawyer y Kate, a quienes describe como dos lobos solitarios, dos
barcos que se alejan en la noche. "Creo que ella tendría una vida más
feliz con Jack", admite. "Más así que con Sawyer". Kim, cuya Sun
permanece separada de su marido Jin hasta ahora, no está de acuerdo.
"Creo que Kate es perfecta para Sawyer".
Llegados a este punto, Holloway puede garantizar sólo un final feliz. El
suyo propio. "Ha sido un honor hacer este viaje con este grupo de gente,
y con esta calidad de guión", dice. "No tiene precio lo que ha
significado para mí como artista y como ser humano. No lo cambiaría por
nada del mundo".